Sabemos que el cabello es una de las zonas más expuestas de nuestro cuerpo, por eso cuando el cabello no se ve o se siente bien nos genera un poco de inseguridad, muchas veces un cabello con mala apariencia es un cabello deshidratado.

¿Qué es la Deshidratación del Cabello?

La deshidratación del cabello ocurre cuando el cabello pierde más humedad de la que recibe, lo que resulta en hebras secas, quebradizas y sin vida. A diferencia del cabello seco, que puede ser una condición natural de algunas personas, la deshidratación es una condición temporal que se puede revertir con los cuidados adecuados.

Causas de la Deshidratación del Cabello

Existen múltiples factores que pueden contribuir a la deshidratación del cabello:

• La exposición prolongada al sol, al viento y al frío puede deshidratar el cabello. Los rayos UV del sol pueden dañar la cutícula del cabello, haciendo que pierda humedad y se vuelva quebradizo.

• El uso frecuente de secadores, planchas y rizadores de cabello puede eliminar la humedad natural del cabello. El calor intenso rompe las proteínas del cabello, dejándolo seco y propenso a romperse.

• Procesos químicos como tintes, decolorantes, permanentes y alisadores que pueden dañar la estructura del cabello y eliminar su humedad natural.

Consecuencias de la Deshidratación del Cabello

La deshidratación del cabello puede tener varias consecuencias negativas:

• Apariencia opaca: el cabello pierde su brillo natural, lo que resulta en un aspecto opaco y sin vida.

• Fragilidad: la falta de humedad hace que el cabello sea más frágil y propenso a romperse. Las puntas abiertas son una señal clara de deshidratación.

• Encrespamiento el cabello: deshidratado tiende a encresparse, ya que busca absorber la humedad del aire.

• Dificultad para  peinar y desenredar: un cabello deshidratado tiende a enredarse con mayor facilidad.

Soluciones para la Deshidratación del Cabello

Afortunadamente, existen varias soluciones para combatir la deshidratación del cabello y restaurar su salud y vitalidad:

• Hidratación interna: Beber suficiente agua es fundamental para mantener todo tu cuerpo, incluido el cabello, bien hidratado. Se recomienda consumir al menos 8 vasos de agua al día.

• Uso de productos hidratantes: Elige champús y acondicionadores sin sulfatos y con ingredientes hidratantes como aceite de argán, aceite de coco, manteca de karité y aloe vera. Los tratamientos profundos y las mascarillas hidratantes también son altamente recomendables.

• Protección contra el calor: Limita el uso de herramientas de calor y, cuando las uses, aplica siempre un protector térmico. Opta  por dejar que tu cabello se seque al aire cuando sea posible.

• Protege tu cabello del sol usando sombreros, pañuelos o productos capilares con protección UV cuando estés al aire libre por períodos prolongados.

• Acude con tu estilista de confianza a tu corte regular para eliminar las puntas abiertas.

En conclusión la deshidratación capilar es un tema común que puede evitarse y solucionarse con una buena rutina de cuidado capilar.