MITOS Y REALIDADES DEL TINTE CON O SIN AMONIACO

Hoy venimos con la intención de  tirar abajo uno de los mitos capilares más extendidos que hay, el de los tintes con amoníaco. Que sí puede provocar irritaciones, que si seca y estropea el pelo. CUIDADO , porque la alternativa sin amoníaco puede ser peor y aquí te contamos todas las razones para escoger con seguridad.

Llevamos años escuchando que los tintes sin amoníaco son la alternativa "segura" . pero esa no es del todo cierto. El amoníaco es necesario para abrir la cutícula y que el color penetre en el cabello.

Los tintes sin amoníaco lo reemplazan con monoetanolamina. Es menos eficiente, por lo que hay que compensar con mayor cantidad y termina rompiendo la fibra capilar.

 El tinte permanente con amoniaco trabaja a base de reacciones químicas que abren la cutícula para después depositar el color en el cabello, dando como resultado una coloración más duradera sin necesidad de aplicaciones consecutivas.

Un tinte que no tiene amoniaco no abre la fibra capilar,el color se posa únicamente sobre la corteza del cabello haciendo que el color se deslave rápidamente, dando como resultado una coloración que tiene que estar siendo retocada constantemente para mantener el color.

Está claro que ambos dañan la hebra capilar, porque hay que abrirla para que el tinte penetre y el nuevo color dure más tiempo.  Con ambos tu cabello va a  sufrir uses el tinte que uses. Sin embargo, varios estudios han demostrado que la monoetanolamina causa más daños a largo plazo.

. Podemos ver y bien de cerca como las cutículas quedan desechas y más dañadas  Aquí podemos comprobar que , los tintes con amoníaco dañan menos el cabello , a pesar de que huelan mucho más fuerte.

Por supuesto, hay excepciones en las que el tinte con amoníaco no es recomendable. Si te causa alergias en el cuero cabelludo, picor, rojeces o quemaduras, pero ojo  que estas reacciones no suelen ser culpa del amoníaco, sino de múltiples factores desde una dermatitis a una hipersensibilidad.

Lo que sí puede hacer el amoníaco es irritar un poco el cuero cabelludo sensible o reactivo, agravando una alergia ya existente. Por eso, es recomendable hacer una prueba en la muñeca 48 horas antes de aplicar el tinte y, en caso de alergia, consultar a un dermatólogo y usar tinte sin amoníaco. 

Pero antes de satanizar el uso de tintes permanentes toma en cuenta todo lo que acabas de leer.

En definitiva, no siempre hay que creer todo lo que nos dicen. Los tintes con amoníaco han sido muy señalados, pero permiten que el color penetre más, dure más tiempo y la cutícula se daña menos. Por eso, en general siguen siendo la opción más efectiva y duradera en la búsqueda de un color perfecto.